Esta vía, producto de la imaginación y audacia del maestro José Luis Fonrouge, conduce mediante una serie de travesías ascendentes, desde la base de la pared, hasta el inicio de las «rocas areniscas». Allí empalma con la vía original/54.
Estas series de travesías ascendentes sortea los seracs del «Glaciar medio», evita las dificultades rocosas de las «grandes torres» y de toda la primera parte del «espolón de los franceses.» Si bien ésta es una de las vías más fáciles de la pared Sur, su trazado es expuestísirno a las avalanchas provenientes de la barrera de seracs del «Glaciar superior».
Fonrouge y su compañero realizaron la escalada en estilo alpino y en solamente cuatro días. A la sazón fue la escalada más rápida de la pared, mérito que perduró más de dos décadas. Hecho este, nada sorprendente, si tenemos en cuenta las dotes de alpinista de extrema vanguardia de Fonrouge. Este talentoso montañero concibió siempre las escaladas más duras y extensas, en estilo estrictamente alpino. Recordemos que de este modo logró en la Patagonia la segunda ascensión del Fitz Roy, por una nueva vía (1964) y asimismo, la segunda ascensión del pico Poincenot (1969), también por un nuevo itinerario.