Reacciones del Organismo

MAM
22 junio, 2017
Servicio Médico
22 junio, 2017

Concepto de Atmósfera

La tierra está rodeada por un océano gaseoso, respirable en sus capas inferiores. Este aire respirable, es una mezcla de gases a diferentes concentraciones y con distintas funciones:

Nitrógeno (78 %) actúa como disolvente del oxígeno y es inerte en las condiciones atmosféricas habituales.

Oxígeno (21 %) es imprescindible para multitud de reacciones químicas del organismo, dada nuestra condición de seres aerobios.

Anhídrido carbónico (0,03 %) estimula el centro respiratorio, permitiendo la respiración automatizada.

Vapor de agua del (1 al 5 %); según su proporción favorece o retarda la evaporación del agua en fase líquida.

Gases raros, como el Helio, Criptón o Xenón, que se encuentran a concentraciones parciales inferiores al 0,001 , son inertes independientemente de su presión.

La presión barométrica global, resultante de la suma de las distintas presiones, oscila en torno a los 750 mmHg al nivel del mar. A esta presión se le da el valor de una atmósfera; la temperatura y el grado de humedad varían considerablemente según la climatología. A medida que se gana altura disminuyen las presiones, tanto barométrica global como las parciales, incluida la del oxígeno y el vapor de agua, por lo que aparece la hipobaria, con hipoxia y sequedad.

Funciones de la atmósfera

Las funciones de la atmósfera son múltiples y algunas se relacionan con los fenómenos vitales. Entre las que se destacan el aporte de aire respirable y la protección frente las agresiones provenientes del espacio, como son radiaciones ultravioletas, cósmicas, etc..

Otros conceptos

Hipobaria: En el montañismo, como consecuencia del ascenso a cotas elevadas, se produce un descenso de la presión ambiental, que origina una cambio en el gradiente de presiones organismo/entorno.

Aerosinusitis: Se debe a la hiperpresión relativa dentro de los senos paranasales, caracterizado por intenso dolor local, en especial si había obstrucción previa (resfrío). El simple vaciado de los senos, resuelve el cuadro de manera espectacular.

Aerootitis: Está causada por una hiperpresión relativa en el oído medio, que se acentúa si hay obstrucción tubárica (resfrío), puede resolverse mediante maniobra de Valsalva, entre otras.

Aeroodontitis: Se caracteriza por dolor local y elevación relativa de la pieza dentaria afectada. Suele ser resistente a los antiinflamatorios.

Aerogastria: Es la distensión gástrica, la cual se acompaña de anoréxia (pérdida del apetito) y dispepsia por inhibición clorhidropéptica. El cuadro puede resolverse por expulsión de gases, favorecida por la administración de dimeticona o cimeticona, asociada a metoclopramida o domperidona.

Aerocolia: Es responsable de la distensión dolorosa del colon, con peristaltismo enlentecido, traducido como constipación.

Estos síntomas suelen responder poco a la terapia sintomática, pero llamativamente se resuelven a los pocos días, cuando se restablece el equilibrio de presiones entre el interior del organismo y el entorno atmosférico.

Hipoxia

El hombre es un ser aerobio riguroso, que si sus células no reciben el oxígeno suficiente mueren. Este fallo de oxígeno puede deberse a diversas causas, como anemia, fallo circulatorio, intoxicaciones, obstrucciones respiratorios y por supuesto, por descenso de la presión parcial de oxígeno respirado.

Nuestro cuerpo no dispone de receptores apropiados para informa de la hipoxia; sólo los quimiorreceptores del seno carotídeo pueden desencadenar mecanismos vegetativos reflejos de compensación, como la taquipnaea (frecuencia respiratoria elevada), que moviliza más el aire respirado hacia los pulmones, y taquicardia (frecuencia cardíaca elevada), que acelera el paso de los hematíes (globulos rojos) hacia los capilares encargados de difundir el oxígeno. Ambos se traducen, subjetivamente, por palpitaciones y sensación de falta de aire (disnea).

En caso de persistir la hipoxia, por permanencia en altura por más de una semana, se produce un aumento del número de glóbulos rojos, con el objeto de permitir una mejor transporte de oxígeno a las células del cuerpo. En caso de que éste aumento progrese excesivamente, sobreviene la poliglobulia, la cual es responsable de procesos isquémicos, al provocar un aumento de la viscosidad sanguínea.